La Academia y el Timao protagonizaron un partidazo en San Pablo, con cuatro golazos.
Racing empató 2-2 frente al Corinthians en Brasil por la ida de las semifinales de la Copa Sudamericana. Se jugó un partidazo, en el que hubo cuatro golazos en San Pablo: Maxi Salas y Gastón Martirena convirtieron para la Academia, y Yuri Alberto marcó un doblete para el Timao. La revancha será el próximo jueves 31 en Avellaneda.
La Academia arrancó con mucha actitud y desde el inicio dejó clara su intención de jugar en el campo rival. A los seis minutos, Adrián Martínez le ganó a Cacá, quien cabeceó hacia atrás y habilitó a Maximiliano Salas. El delantero de Racing vio adelantado al arquero Hugo Souza y de cachetada puso el 1-0. Pero poco le duró la alegría al equipo argentino, ya que cinco minutos más tarde el Corinthians empató luego de una gran asistencia de Memphis Depay para Yuri Alberto, quien definió de forma sutil ante Gabriel Arias.
Tras la igualdad del elenco brasileño, ambos bajaron la intensidad y el trámite no pasó de algunos pelotazos en un campo de juego complicado por la constante lluvia que cayó en la noche paulista. La cancha se prestó para el remate desde afuera del área y mediante esta vía llegó otro golazo de Yuri Alberto, en este caso con un potente disparo desde afuera del área que hizo estéril la reacción de Arias.
El equipo argentino tomó las riendas en el complemento con mayor presión y recuperación en el mediocampo. También fue agresivo en la presión en el área rival. Aunque el empate llegó gracias a una gran jugada de Gastón Martirena, que se proyectó y con caño incluido tras una pared con Agustín Almendra, sacó un certero remate de derecha desde afuera del área para firmar el 2-2.
“Siempre dije que íbamos a salir a jugar de igual a igual en todas las canchas. Si tenía que haber habido un ganador tendríamos que haber sido nosotros”, dijo Gustavo Costas, entrenador de Racing, en la conferencia de prensa. “Hicimos un partidazo y no merecimos perder. Ellos llegaron tres veces y convirtieron dos goles. A nosotros nos vienen los dos goles por no tirar la pelota afuera. Pero nos adaptamos a la cancha como pudimos”, agregó. Y aclaró: “La serie está abierta y estamos enfrentando a un equipo que tiene un poderío económico mil veces mayor al nuestro. No somos boludos de pensar que ya estamos en la final”.
Sobre el final, a Costas le preguntaron sobre la seguridad de los hinchas del Corinthians en Buenos Aires y respondió de manera tajante: “En Argentina no hay tanta inseguridad como cuando viene la gente acá. Vimos lo que pasó con los uruguayos y teníamos a nuestra familia que venía hacia el estadio. Estábamos muy preocupados. Quédense tranquilos que en la Argentina no pasan estas cosas”.
La revancha será el jueves próximo en Avellaneda, desde las 21:30. El ganador de esta llave jugará la final con el vencedor de Lanús-Cruzeiro, que empataron 1-1 en el encuentro de ida disputado en Brasil y el segundo duelo será el miércoles venidero, a partir de las 19 en La Fortaleza.
Racing no juega una final de copa internacional desde hace 32 años, en la derrota en la Supercopa Sudamericana del 92, cuando perdió 4-1 en el global ante Cruzeiro. Además, su última presencia en las semifinales de un certamen continental fue en la Libertadores del 97, cuando fue eliminado por Sporting Cristal de Perú. Su último lauro fue en la Supercopa de 1988. Por su parte, Corinthians tocó la gloria internacional por última vez en 2012 (Libertadores ante Boca) y 2013 (Recopa Sudamericana ante San Pablo).
El trámite creció en intensidad y el partido estuvo para los dos. Los cambios les cayeron bien y los mejores exponentes fueron Luciano Vietto en Racing e Igor Coronado en el Corinthians. Ambos quisieron el triunfo y el ritmo fue dinámico en un final dramático en San Pablo. Las últimas fueron para los locales: Ángel Romero tuvo el triunfo, pero llegó exigido y al lado del arco la tiró por arriba. Y en el final, Arias se vistió de héroe para salvar el empate. La serie está abierta.