Los piqueteros desafiarán el protocolo del Gobierno y marcharán al Congreso contra el veto a la ley de movilidad jubilatoria

Política

El Polo Obrero, organizaciones de izquierda, las CTA, y movimientos sociales peronistas se concentrarán este miércoles desde las 13. 


La marcha de este miércoles frente al Congreso de la Nación contra el veto presidencial a la Ley de Movilidad Jubilatoria no será una más. Los organizadores sociales, piqueteras y sindicales aseguran que la concentración será numerosa y advirtieron que están dispuestos a desafiar a las fuerzas de seguridad si estas, como las dos veces anteriores, aplican el protocolo antipiquetes. A partir de las 13 se espera que comience la convocatoria, mientras tanto en Diputados se estará debatiendo -en una sesión especial convocada desde las 11- el intento de la oposición de revertir la decisión del Ejecutivo con la normativa que ya fue aprobada en ambas cámaras.

Eduardo Belliboni, el líder del Polo Obrero y referente de la Unidad Piquetera, por un lado, y Hugo “Cachorro” Godoy, Secretario General de la CTA Autónoma, y Hugo Yasky, Secretario General de la Central de Trabajadores de la Argentina, son los principales referentes de la convocatoria a la que adhirieron las organizaciones nucleadas en la Unión Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) entre las que destacan el Movimiento Evita, liderado por Emilio Pérsico; Barrios de Pie, su coordinador nacional es Daniel Menéndez, La Corriente Clasista y Combativa (CCC) de Juan Carlos Alderete; y el Movimiento de Trabajadores Excluidos referenciado en el abogado Juan Grabois Nicolás Caropresi.

De esta manera, los piqueteros y sectores sindicales se plegaron a las organizaciones de jubilados que todos los miércoles convocan a concentrarse frente al Anexo del Congreso de la Nación, ubicado sobre Avenida Rivadavia, entre Combate de los Pozos y Callao. Esta vez la protesta se realizará en la Plaza Congreso, ubicada sobre la Avenida Entre Ríos entre Callao e Hipólito Yrigoyen.

Funcionarios de la cartera de Seguridad advirtieron, al ser consultados por este medio, que las fuerzas federales van a desplegar un “amplio operativo” para evitar desbordes, el corte de arterias, la circulación vehicular y “cualquier tipo de ataque al Palacio Legislativo o a los diputados oficialistas y de bancadas aliadas que intentarán bloquear la intención de la oposición más dura, conformada, por ejemplo, por legisladores de Unión por la Patria y de izquierda, para dar marcha atrás con el veto.

La marcha está precedida por declaraciones inflamables:

  • ”El veto presidencial a los jubilados es un ataque vergonzoso, repugnante y criminal”, disparó Belliboni y calificó el uso de la fuerza policial contra los adultos mayores de los dos últimos miércoles como un acto “repugnante” y “vergonzoso”. En ese sentido, recordó: “El episodio represivo de la semana pasada cuando, con gas pimienta y cachiporra, la policía de Bullrich reprimió a jubilados y jubiladas. Me llamó mucho la atención que esto no fuera un escándalo nacional y que las centrales obreras no abrieran la boca”.
  • Por su parte, el dirigente sindical “Cachorro” Godoy opinó que “el veto presidencial es un acto cruel y brutal, como cruel y brutal fue la represión a los jubilados y jubiladas. No puede ser que nos hagan creer que la única salida es esta cruel política de despojo, saqueo y entrega”.
  • ”El miércoles vamos a estar en las calles para ponerle un freno a este gobierno de hambre y defender a nuestros abuelos”, anticipó Alejandro “Peluca” Gramajo, secretario general de la UTEP.
  • ”El plan de este Gobierno se sostiene ajustando a los jubilados”, dijo, por su parte, Daniel Menéndez, ex funcionario de Alberto Fernández y en la actualidad de Axel Kicillof.Horas antes de la marcha de los jubilados y piqueteros, la ministra Patricia Bullrich sostuvo: “Nosotros tenemos una decisión, que este país tenga orden público. Las personas pueden marchar pero bajo ciertas circunstancias, hay un protocolo”, fundamentó en Radio Con Vos. Al ser consultada por la “represión contra los jubilados” argumentó: “Los que estaban (manifestando) son los de siempre, las mismas organizaciones que hace años tenían tomada la calle y ahora no la pueden tomar más. Hicimos lo que hacemos siempre” e insistió en que los que estaban allí no eran personas mayores. “Jubilados no había prácticamente ninguno (…) sobre todo eran organizaciones, estaban (Eduardo) Belliboni y los partidos de Izquierda”.De esta manera, los movimientos sociales volverán a desafiar el protocolo antipiquetes del Gobierno nacional luego de cinco meses sin marchas y cortes en el centro porteño, sobre todo de la Avenida 9 de Julio, en este caso, para rechazar el veto presidencial al aumento para los jubilados que votó el Congreso y que genera controversia.La ley vetada -sancionada por el Senado el 22 de agosto por holgados dos tercios, con 61 votos positivos y 8 negativos- establecía una recomposición del 8,1% en las jubilaciones, de modo de complementar el 12,5% de incremento adicional otorgado en abril por el DNU 274/24 del Gobierno, de modo de alcanzar a compensar lo que fue la inflación más alta del año, la de enero, con 20,6%.Diez días después, el 2 de septiembre, a través del decreto 782/24, el Poder Ejecutivo Nacional (PEN) vetó totalmente la ley y fundamentó que el proyecto sancionado por el Congreso “es manifiestamente violatorio del marco jurídico vigente en tanto no contempla el impacto fiscal de la medida ni tampoco determina la fuente de su financiamiento”. Desde el PEN también se argumentó que “dar cumplimiento a la medida sancionada por el Honorable Congreso de la Nación dificultaría gravemente la sostenibilidad de las finanzas públicas de la República Argentina, ya que significaría la necesidad de obtener una fuente de financiamiento extraordinaria, imprevista, a efectos de afrontar su costo, sea a través de deuda pública o aumento de impuestos”.