Las restricciones a las importaciones, la suba de tasas y el alto nivel de inflación perjudicó el desempeño de las empresas del sector, con caída de producción, ventas y exportaciones.
Los industriales aglutinados en la Unión Industrial Argentina (UIA) advirtieron en la habitual encuesta trimestral que produce el Centro de Estudios (CEU) de la entidad sobre una posible profundización de la desaceleración económica en los próximos meses.
El relevamiento da cuenta del deterioro del desempeño de la actividad hacia fines del año pasado, tendencia que destacó no sólo se mantuvo durante principios de este año sino que podría empeorar en el corto plazo. La conclusión coincide con los datos oficiales difundidos ayer por el INDEC según los cuales la economía cayó 1,5% en el último trimestre del año pasado respecto al período anterior. En ese contexto, de acuerdo al relevamiento industrial, “casi la mitad de las empresas relevadas disminuyó su producción” en enero de este año mientras que también las ventas cayeron para 46% de las compañías y el 34% registró una caída en las exportaciones.
“El crecimiento que venía manifestando la actividad industrial comenzó a mostrar una desaceleración hacia fines de 2022, en un contexto de mayores restricciones a la importación de insumos, elevados niveles de inflación y suba de tasas de interés, sumado a una mayor base de comparación”, diagnosticó el estudio de la central fabril, el que precisó que el Monitor de Desempeño Industrial del CEU-UIA (MDI) se ubica desde julio por debajo de 50, lo que también se reflejó en los datos de producción del IPI-CEU: en junio alcanzó el valor máximo y a partir del mes siguiente comenzó a mostrar caídas mensuales.
“Los primeros datos de 2023 indican que esta tendencia se mantuvo y que se podría acentuar. El relevamiento con datos de enero indicó, una merma en los indicadores de producción, ventas y empleo, que excede a cuestiones estacionales. Así, el MDI volvió a ubicarse debajo de 50 por tercer relevamiento consecutivo, lo que anticipa para los próximos meses un menor nivel de actividad”, sostuvo la entidad.
En términos de producción, el relevamiento identificó que el 45,2% de las empresas encuestadas registraron en enero una caída en la producción respecto del promedio del cuarto trimestre de 2022 mientras que “sólo el 15,6% de ellas indicaron que la incrementaron durante dicho período”. Se aclaró que si bien existe un efecto estacional, con menores niveles de actividad durante los meses de verano por paradas de planta y vacaciones, el porcentaje de empresas con subas en la producción había sido de 21,5% en enero de 2022 (que incluso se había visto afectado por la tercera ola de covid-19), mostrando efectivamente una desaceleración de la producción durante el inicio de 2023.
En cuanto al nivel de ventas, la encuesta señaló que en sintonía con la evolución de la producción, las ventas también mostraron un menor dinamismo durante enero. El 45,8% de las empresas relevadas registraron una caída en sus ventas al mercado interno en el mes de enero en relación al promedio del cuarto trimestre del 2022. “Se trata de un desmejoramiento considerable, ya que dicho porcentaje había sido de 35,5% en octubre de 2022 y de 28,9% en enero de 2022. El menor dinamismo se observó también para las exportaciones, con un 34,3% de las empresas con caídas respecto del cuarto trimestre de 2022″.
Esta performance negativa a nivel industrial no impactó sólo entre las grandes empresas sino que también las pequeñas y medianas industrias (pymis) mostraron un menor dinamismo tanto en la producción como en las ventas durante enero. Un 45,8% de ellas registraron caídas en la producción (en octubre este porcentaje había sido de 30%), mientras que sólo un 15,3% registraron subas (en comparación con el 21,7% registrado en octubre). El bajo dinamismo también puede observarse en las ventas al mercado interno y las exportaciones.
Por su parte, el empleo industrial comenzó a reflejar el empeoramiento del entorno económico ya que mostró, según la UIA, un menor desempeño durante enero. Un 17,8% de las empresas indicaron que redujeron su dotación de personal respecto del promedio del cuarto trimestre de 2022, superior al 10,5% registrado en el relevamiento anterior del mes de octubre. Se trata del valor negativo más alto registrado en la serie y superó por primera vez al porcentaje de empresas que, por el contrario, reportaron subas en su dotación de personal, que fue de 13,9% en enero de 2023.
En ese marco, la buena noticia es que al menos se frenó el deterioro de las expectativas reflejado en los últimos tres relevamiento aunque se estabilizaron en un nivel bajo. Así lo explica la encuesta: “Si bien se detuvo la tendencia a la baja de los últimos tres relevamientos, las expectativas de las empresas sobre su situación económica se encuentran en niveles bajos si se comparan a las que había a inicios del 2022″. Según se detalló, sólo el 31% de las empresas esperaba en enero de 2023, una mejor situación económica de su empresa para los próximos meses mientras que un año atrás, ese porcentaje supera 50% de las compañías que esperaba una mejor situación. Algo similar -indicó- se observa en las expectativas de las empresas sobre la situación de su sector de actividad, con un 26,5% de las empresas esperando un mejor panorama para los próximos meses.
“Por su parte, las expectativas de las empresas respecto de la situación económica del país mostraron una mejora luego de cuatro relevamientos consecutivos de caída. Sin embargo, se encuentran todavía en niveles bajos (sólo el 20,3% esperaba en enero una mejor situación para los próximos meses) y también por debajo del mismo mes de 2022 (25,4%)”, resumió el informe.