El fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, confirmó el arresto de Jack Teixeira, un joven de 21 años y miembro de la Guardia Nacional Aérea de Massachusetts.
El FBI arrestó este jueves en la localidad de North Dighton (Massachusetts), en el noreste del país, al supuesto autor de las filtraciones de documentos secretos que han sacudido a Estados Unidos en los últimos días y que podría ser la más grave en una década.
El fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, informó en una breve comparecencia ante los medios de comunicación que el detenido es Jack Teixeira, un joven de 21 años y miembro de la Guardia Nacional Aérea de Massachusetts. De esta manera, confirmó la información que divulgó la prensa norteamericana sobre la identidad del sospechoso.
Garland indicó que la detención se llevó a cabo “en relación con una investigación sobre la presunta sustracción, retención y transmisión no autorizadas de información clasificada de defensa nacional”. Detalló, asimismo, que el operativo se realizó “sin incidentes”.
Los canales de televisión de Estados Unidos mostraron un gran dispositivo policial alrededor de la vivienda en North Dighton de Teixeira con helicópteros sobrevolando los alrededores.
En las imágenes proporcionadas por los medios norteamericanos se lo puede ver al detenido con pantalones cortos rojos y las manos a la espalda, siendo introducido por agentes fuertemente armados en un vehículo utilitario deportivo sin identificación, en una zona boscosa de North Dighton.
Ahora, Teixeira deberá comparecer ante el Tribunal de Distrito de Massachusetts.
Según The Washington Post, Teixeira pudo acceder a información clasificada gracias a su trabajo como técnico informático en una base de la Guardia Nacional Aérea de Massachusets.
Tras acceder a los documentos, Teixeira supuestamente los colgó en la plataforma Discord, popular entre aficionados a los videojuegos, con el objetivo de impresionar a otros jóvenes. Discord ofrece chats con texto, voz y video y se describe como un lugar “donde puedes pertenecer a un club escolar, un grupo de videojuegos o una comunidad artística mundial”.
En uno de esos foros, originalmente creado para discutir una amplia gama de temas, los miembros empezaron a hablar de la guerra en Ucrania. Según un miembro del chat, un integrante no identificado colocó allí documentos que dijo eran secretos, primero transcribiéndolos acompañados con sus propios pensamientos y, hace unos meses, subiendo imágenes de páginas dobladas.
Discord informó que está cooperando con las autoridades norteamericanas.
Posteriormente, esos documentos se difundieron por otras redes sociales, como Telegram, y acabaron en las portadas de grandes diarios de todo el mundo.
Los informes indicaron que el presunto filtrador, que se hacía llamar “OG”, publicaba regularmente documentos en el grupo de chat Thug Shaker Central desde hacía meses. Teixeira contó a los miembros del chat que pasaba “parte del día dentro de una instalación de seguridad en la que estaban prohibidos los teléfonos móviles y otros dispositivos electrónicos”, según el informe del Post. Primero anotó el contenido de documentos clasificados para compartirlo con el grupo, pero después empezó a hacer fotos, diciendo a los demás miembros que no las compartieran.
Según el medio norteamericano, citando a uno de los miembros del grupo, Teixeira tenía una “visión oscura del gobierno” y “hablaba de Estados Unidos, y en particular de las fuerzas del orden y la comunidad de inteligencia, como una fuerza siniestra que buscaba reprimir a sus ciudadanos y mantenerlos en la oscuridad”.
El gobierno estadounidense ha estado evaluando las consecuencias a nivel de seguridad nacional y diplomático de la filtración desde que fue reportada por primera vez la semana pasada. Un portavoz del Pentágono dijo a reporteros días atrás que las revelaciones plantean “un riesgo muy serio a la seguridad nacional”, por lo que el Departamento de Justicia inició una investigación para dar con los responsables.
El presidente estadounidense, Joe Biden, de visita en Dublín, dijo este jueves que el Departamento de Justicia estaba “cerca” de saber más sobre la filtración de documentos secretos del Pentágono.
Los documentos detallan la evaluación estadounidense de la guerra en Ucrania e incluyen planes para reforzar al Ejército ucraniano con vistas a una contraofensiva, así como datos sobre el estado de las fuerzas rusas. Además incluye material sensible sobre Canadá, China, Israel o Corea del Sur.