El lugar servía de base para la inteligencia del movimiento islamista.
La aviación israelí bombardeado este lunes la sede principal del servicio de seguridad interna del grupo terrorista Hamas en la Franja de Gaza.
“Cazas del Fuerzas Aéreas han lanzado un ataque contra la sede operativa principal de las fuerzas de seguridad interna de Hamas en el distrito de Rimal, en el norte de Gaza”, explicó el Ejército israelí en un comunicado.
La sede en cuestión era la parte central de “la infraestructura terrorista de Hamas” y servía de base para la inteligencia del movimiento islamista. El Ejército israelí destacó que alertó a los residentes del ataque y les dio suficiente tiempo para evacuar el edificio.
Además, el Centro de Información Palestino informó de que el complejo del alcalde de la ciudad de Gaza también fue objeto de los ataques del Ejército de Israel, mientras que también habrían atacado una sede del Gobierno local. Además, barcos militares israelíes atacaron a la fuerza naval de Hamas en la costa de la Franja de Gaza.
Durante la madrugada de este martes volvieron a registrarse enfrentamientos en Jerusalén y en ciudades colindantes, según informó la agencia de noticias palestina Maan.
En medio de las reyertas entre jóvenes palestinos y fuerzas de seguridad israelíes, lanzaron un cóctel molotov contra un edificio del barrio Armon Hanatziv, informó The Times of Israel. También incendiaron varios coches de propiedad judía.
Por otra parte, las sirenas volvieron a sonar esta madrugada de martes en ciudades cercanas a la Franja, así como en la ciudad de Netivot, tras una pausa de más de seis horas en los lanzamientos de cohetes desde Gaza.
En referencia a Netivot, Hamas se atribuyó el bombardeo contra la ciudad como respuesta a la “agresión sionista”.
Por otra parte, el Ejército israelí informó del lanzamiento de hasta seis proyectiles desde territorio libanés que ni siquiera lograron alcanzar la frontera.
“En respuesta, la artillería del Ejército israelí devolvió el fuego sobre el origen de los lanzamientos”, explicó el Ejército, citado por el diario The Times of Israel. Previamente, el Ejército israelí había informado de que “dos sospechosos se acercaron y saltaron la valla fronteriza entre Líbano y el territorio israelí en el área de Menara”.
Ante esta presunta incursión, las fuerzas de Israel “iniciaron un procedimiento de arresto” en el que lanzaron disparos al aire, que no logró que los sospechosos se alejaran, por lo que soldados israelíes “dispararon contra las piernas de los sospechosos”, consiguiendo que se alejaran.
La Fuerza Provisional de Naciones Unidas para el Líbano (UNIFIL, por sus siglas en inglés) confirmó también estos “disparos de cohetes desde la zona general de Rashaya Al Foukhar al norte de Kfar Chouba en el sur de Líbano”, tras lo que el jefe de la misión, Stefano del Col, se puso “inmediatamente en contacto con las contrapartes del Ejército de Líbano y del de Israel”.
Del Col instó “a ejercer la máxima moderación para evitar cualquier escalada de la situación”, según informó la UNIFIL a través de su cuenta de Twitter, mientras que informaron que desde Israel “han detenido el fuego” y “la situación en el área esta ahora en calma”.
Por último, la misión de la ONU destacó que está coordinándose con el Ejército libanés para mejorar “el control de seguridad en la zona” e intensificó “las patrullas para evitar nuevos incidentes que pongan en peligro la seguridad de la población local” en el sur del país.
Este lunes, preguntado por un tercer bloqueo por parte de Washington a la aprobación de una declaración conjunta en el Consejo de Seguridad pidiendo un alto el fuego entre Hamas e Israel, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, dijo que Estados Unidos “no obstaculiza la diplomacia”.
“Al contrario, la estamos ejerciendo sin parar”, ha asegurado, para plantear si “cualquier acción, cualquier declaración, en la práctica, hará avanzar las perspectivas de acabar con la violencia”, para responder que “si pensamos que hay algo, incluso en Naciones Unidas, que efectivamente lo haga avanzar, estaremos a favor”.
Blinken expresó que desde Washington consideran “muy importante” celebrar “este debate abierto en el que las partes pudieron exponer sus puntos de vista, sus preocupaciones, y ser escuchadas”.
Por último, reiteró que seguirán “buscando formas de avanzar en el objetivo que tenemos, que es poner fin a la violencia”.