Tras reunirse con el ministro de Economía argentino, la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) señaló que las conversaciones por un nuevo programa con el país continúan “de manera constructiva”.
La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, dijo que las negociaciones sobre el nuevo programa de Argentina “prosiguen de manera constructiva”
“Muy buena reunión”, escribió en Twitter la funcionaria del FMI, casi tres horas después de haber culminado su encuentro de dos horas con el ministro de Economía, Martin Guzmán. “Nuestros equipos trabajan de manera constructiva para ayudar a fortalecer la estabilidad económica, proteger a los vulnerables y promover el crecimiento sustentable. Nuestro diálogo estrecho continuará”.
El tuit de Georgieva fue la única reacción oficial del FMI tras el encuentro al que el ministro argentino arribó con una agenda enfocada en acordar un nuevo cronograma de pagos para la deuda por USD 45.000 millones que la Argentina mantiene con el Fondo.
No se esperaba que la reunión, la primera presencial desde el seminario académico que ambos compartieron en febrero del año pasado en el Vaticano, arrojara una resolución de corto plazo.
La oficina de comunicaciones del FMI le dedicó al encuentro apenas un tuit desde la cuenta de su directora. No hubo un comunicado de prensa como en ocasiones anteriores. Desde el ministerio de Economía tampoco hubo una comunicación sobre la reunión, a la que también asistieron la directora adjunta del Hemisferio Occidental Julie Kozack y el jefe de la misión argentina Luis Cubeddu.
Guzmán ingresó a las 14 (hora argentina) a la sede del FMI para reunirse con Georgieva. Llegó al edificio caminando y acompañado por un grupo de colaboradores, entre ellos el director argentino ante el FMI, Sergio Chodos, y la encargada de Asuntos Internacionales del ministerio de Economía, Maia Colodenco, después de reunirse durante la mañana en la embajada argentina con personal técnico del Fondo.
La reunión tuvo lugar el mismo día en que el directorio del FMI planeaba abordar “informalmente” una ampliación del capital de sus países miembros que le reportaría a la Argentina un incremento de USD 3.500 millones en las reservas del Banco Central, según publicó la agencia Bloomberg.
Guzmán busca destrabar una negociación que ya acumula siete meses y que tuvo pocos avances. El objetivo del Gobierno es reprogramar la devolución de los USD 45.000 millones que el FMI desembolsó hacia el Tesoro entre 2018 y 2019, en una negociación que estuvo teñida de las internas políticas del Frente de Todos en los últimos meses, por distintos motivos.
El calendario original que planteó Guzmán implicaba tener un programa financiero nuevo con el Fondo en mayo para encarar de inmediato la otra negociación de la deuda que tiene en el horizonte la Argentina: el Club de París. A este consorcio de naciones acreedoras, el Gobierno debería pagarle unos USD 2.400 millones pendientes.
En septiembre está previsto un pago de capital al FMI por USD 1.900 millones. Desde su llegada al poder, el gobierno de Alberto Fernández ha girado al organismo pagos por al menos USD 1.200 millones.
Guzmán inició sus actividades en Washington ayer ratificando que el Banco Mundial otorgará créditos a la Argentina destinados al desarrollo de infraestructura, protección social, salud, empleo y cambio climático por USD 2.000 millones durante 2021, de los cuales ya se aprobaron unos USD 420 millones el mes pasado.
El ministro cerrará el miércoles su estadía en Washington visitando el Departamento del Tesoro que conduce Janet Yellen, dada la influencia que Estados Unidos ejerce en las decisiones adoptadas por el directorio del Fondo.
El tramo estadounidense será la primera parte de una gira que lo llevará posteriormente a Europa para renegociar la deuda con el Club de París. Pero antes volverá a Buenos Aires para actuar como anfitrión el viernes 26 de una Cumbre del Mercosur a celebrarse de manera virtual.